Paralelos y antiparalelos por declinación
Las posiciones de los planetas a lo largo de los signos zodiacales que vemos en una carta astral representan su ubicación respecto al círculo de la eclíptica, en sentido antihorario tomando como inicio el punto Vernal o Aries.
Es lo que se denomina longitud eclíptica porque pertenece al sistema de coordenadas celestes eclípticas. La otra coordenada ecliptica es la latitud eclíptica: el ángulo que forma el astro respecto a la ecliptica, que puede ser norte o sur. Por decirlo de una forma muy simple (y no del todo correcta): longitud sería izquierda-derecha, mientras que la latitud, arriba-abajo (de la eclíptica).
Recordemos que la eclíptica es la trayectoria aparente que va
trazando el Sol a lo largo del año observado desde la Tierra. Y se llama
así porque marca el plano donde se producen los eclipses.
En las cartas astrales siempre vemos la longitud eclíptica de los
astros y nunca la latitud. Las conjunciones y los aspectos se
refieren por tanto a la longitud eclíptica. Esto es como medir el espacio
sólo con una dimensión. Sin embargo hay otra forma de
representar las posiciones planetarias en una segunda dimensión: a
través de su declinación (Dec).
La declinación, junto con la ascensión recta o derecha, pertenece al sistema de coordenadas celestes ecuatoriales, en el que el plano del Ecuador Celeste
es la referencia. La ascensión recta (AR) nos dice dónde está un astro a
lo largo del Ecuador Celeste, a partir del punto Vernal, (de forma
análoga a la longitud eclíptica). La declinación (Dec) se refiere al
ángulo que forma el astro con el Ecuador Celeste, norte (+) o sur (-).
De nuevo simplificando, la AR sería la situación izquierda-derecha,
mientras que la Dec arriba-abajo, pero esta vez del Ecuador Celeste.
Recordemos que el Ecuador Celeste es el círculo máximo en el
mismo plano que el Ecuador de la Tierra, proyectado sobre la Esfera
Celeste.
Vemos que la longitud ecliptica es equivalente a la ascensión recta mientras que la latitud eclíptica lo es a la declinación, en sus marcos de referencia respectivos: Eclíptica y Ecuador Celeste.
La Eclíptica presenta una inclinación de 23° 27' respecto al
Ecuador Celeste debido a la inclinación del eje de rotación de la Tierra
que no es perfectamente perpendicular al plano eclíptico.
Por supuesto, ambos sistemas de coordenadas, el eclíptico y el ecuatorial son geocéntricos:
que quiere decir que representan las posiciones de los astros vistas
desde el observador situado en la Tierra (en lugar de ser
heliocéntricas: ubicando al Sol en la posición central).
Se dice que dos astros se hallan en paralelo cuando forman el mismo ángulo con el Ecuador Celeste, es decir: cuando tienen la misma declinación norte o sur. Si la declinación de los dos astros es similar pero la de uno es norte y la del otro es sur, entonces están en antiparalelo o contraparalelo, es decir: con declinaciones opuestas.
Aunque técnicamente no sean aspectos (como los eclípticos) se conoce a estas posiciones como aspectos ecuatoriales o aspectos por declinación.
Al paralelo se le suele dar un sentido similar al de la conjunción, mientras que al antiparalelo se le identifica con la oposición. Y como tales posiciones son referidas al Ecuador Celeste que es una proyección del ecuador de la Tierra sus significados son "terrestres", es decir, que tienden a una manifestación en la realidad objetiva en forma de hechos concretos.
Generalmente se admite 1º o 1.5º de orbe para ambas posiciones aunque también se practican variaciones sutiles de orbe según el grado de declinación.
El glifo representativo consta de dos líneas verticales paralelas, en el caso del paralelo y de las dichas líneas cruzadas por otra horizontal para el antiparalelo.
¿Cómo comprobar si dos planetas se hallan en estas posiciones de aspecto por declinación? Hay que mirarlo en las correspondientes efemérides o software.
También es recomendable examinar las posiciones de paralelo y antiparalelo en los tránsitos y progresiones.
En conclusión: las posiciones de paralelo y antiparalelo añaden una nueva dimensión a las del radix, al introducir otra coordenada espacial, proporcionando valiosa información que nos pasaría desapercibida usando sólo aspectos basados en grados eclípticos, tanto en la carta natal como en tránsitos y progresiones.Paris a.m.g.